Cuando pensamos en adquirir una vivienda debemos tener en cuenta que estamos realizando una inversión a medio y largo plazo y que debemos desembolsar gran parte de nuestro dinero ahorrado.
Lo más habitual es que tomemos una decisión meditada huyendo de impulsos, para tomar la mejor decisión conforme a la vivienda que será la que nos acompañe durante mucho tiempo. No obstante, antes de dar este paso tan importante debemos valorar qué tipo de vivienda podemos permitirnos. Es decir, valorar nuestras posibilidades mediante una sociedad de valoración y así tomar la mejor decisión en base a nuestros ingresos.
Tasación de la vivienda
Una sociedad de valor o sociedad de tasación nos ayuda a conocer el valor real de la vivienda para tomar la mejor decisión. Si conocemos el valor actual de la vivienda podremos conocer si la inversión tiene sentido o, si por el contrario, estamos tomando una mala decisión desde el plano económico.
Conocer los detalles de una vivienda también nos ayudará a tomar la decisión correcta. No solo el valor del inmueble importa, sino que a la hora de elegir una casa debemos tener en cuenta otros parámetros del día a día.
Por ejemplo, la distancia con las avenidas comerciales o la distancia con nuestro trabajo. Estos pequeños detalles pueden ser muy importantes a la hora de firmar la compra de un inmueble, tanto si lo queremos para invertir como si lo queremos para residir en él de forma prolongada.
Nivel de ingresos percibidos
Tras valorar una vivienda, debemos centrarnos en calcular nuestro nivel de ingresos para ver si el importe del inmueble está por encima de nuestras posibilidades. La regla más habitual es que la cuota mensual de la hipoteca no debe superar un 30-40% del sueldo neto que percibimos. Es decir, si actualmente ganas 1.000 € netos al mes, tu letra de hipoteca no deberá ser mayor de 300-400€ al mes.
Obviamente, estos datos son solo una estimación ya que es posible que tus gastos sean mayores por otras cargas mensuales como la letra de un coche o gastos adicionales. También debemos valorar los gastos de comunidad, que suelen rondar los 70€ al mes e incluirlos en nuestra estimación.
La edad, factor clave para adquirir una vivienda
Otro de los factores a tener en cuenta para valorar si podemos permitirnos comprar una vivienda en concreto es el tema de la edad. La edad es un criterio muy importante a la hora de tomar la decisión de adquirir un inmueble, ya que determinará cuanto tiempo debemos estar pagando la casa. No obstante, ser joven puede impedir que compres una vivienda por tu falta de ingresos o tu falta de experiencia en el mercado laboral.